Abrazos, lágrimas y ovación a la exvicepresidenta en un acto sin palabras de Oltra

Mas recoge la cartera de Oltra: “No soy tu sustituta porque eres insustituible”.

La nueva vicepresidenta portavoz y consellera de Igualdad, Aitana Mas, ha recogido la cartera de Mónica Oltra tras un discurso en el que ha prometido que será “directa, clara y accesible”, que tratará de que la política no le robe tiempo como mujer, joven y madre y que centrará gran parte de su agenda en Alicante para descentralizar la Comunitat Valenciana.

“No soy tu sustituta porque eres insustituible. Gracias por haberte dejado la piel por tu compromiso indestructible de mejorar la vida de la gente. Gracias por haber cambiado la historia de este pequeño país. Más allá de las controversias, más allá de los que prefieren vivir con hostilidad, esta realidad nadie la podrá borrar”, se ha dirigido emocionada Mas a Oltra antes de recordar que aprendió la política a través de ella y de fundirse en un abrazo.

Tras un largo aplauso, la ya vicepresidenta más joven de la Generalitat con 32 años ha saludado a la “vicepresidenta” saliente, quien dimitió la semana pasada tras su imputación por el presunto encubrimiento de los abusos de su exmarido a una menor tutelada. Mónica Oltra no ha realizado declaraciones en el acto celebrado el Palau dels Catalá de Valeriola, sede de la Vicepresidencia.

Mas, consciente de la responsabilidad que asume y de las “circunstancias”, ha reconocido que no es fácil y que Igualdad y Políticas Inclusivas es “seguramente la cartera más difícil de gestionar, pero también la más satisfactoria”. Ha destacado el “impulso valiente” que le ha dado Oltra y su equipo desde 2015, con un “sólido” sistema público de servicios sociales y una “agenda feminista emancipadora”.

Un trabajo que ha descrito como “pequeñas revoluciones irreversibles que se han conquistado y no se han perdido”, entre los que ha recordado la gestión de “listas de espera insostenibles”. De hecho, ha recordado que su abuelo murió siendo dependiente y tuvo que vivir cómo el anterior gobierno del PP “le recortaba sin ninguna explicación humana su prestación hasta 20 euros mensuales”, por lo que se ha comprometido a no dejar a nadie atrás aunque haga falta más personal y financiación.

APELA A LA “LEALTAD MUTUA” DEL BOTÀNIC

Pero ha advertido que “los derechos conquistados están de nuevo en peligro” por culpa de “una tendencia global reaccionaria” ante la que “la respuesta no puede ser el miedo”, sobre todo por los jóvenes que han crecido de crisis en crisis. Ha abogado así por fortalecer los servicios públicos, los derechos y los espacios de convivencia, para lo que ha alentado al gobierno del Botànic (PSPV-Compromís-UP) a trabajar con “escucha activa, diálogo sereno y decisiones valientes”.

“No son muchos los meses que quedan, pero han de ser los meses de la generosidad y la gobernabilidad, los meses del buen gobierno”, ha dicho con vistas a las elecciones de 2023, en una llamada a mantener el pacto “con eficacia y lealtad mutua de todas las partes”. Por eso ha avisado que solo sumarán las victorias “presentadas y entendidas como una acción de todo el gobierno”.

Mas, tras lamentar que la política va demasiado rápido y la administración lenta, ha garantizado que su vicepresidencia no tendrá “nada de ornamental” y se ha comprometido a ser “coherente” con los usos del tiempo, especialmente con la crianza. “Ser vicepresidenta debe ser compatible con ser y ejercer de madre”, ha reivindicado, advirtiendo que de lo contrario la política se convierte en una “trituradora de personas” que aleja la realidad.

Otro de sus objetivos es profundizar en descentralizar la Comunitat, porque ser vicepresidenta también “debe ser compatible con ser crevillentina, de Alicante, del sur”, para lo que ha avanzado que gran parte de su agenda se desarrollará en estas comarcas y que será clave la futura ley de igualdad de género. “La política va más allá de los palacios de València”, ha ilustrado, y ha abogado por las políticas “conscientes de la diversa realidad territorial” de la Comunitat.

NI CHASCARRILLOS NI DISCURSOS GRANDILOCUENTES

Como portavoz del Consell, a un día de su primera comparecencia tras el pleno semanal, ha pedido a los periodistas ser capaces de “cuidarse y respetarse” mutuamente, cada uno dentro de su labor, y ha hecho hincapié en que no perderá el tiempo en “chascarrillos, filtraciones ni discursos grandilocuentes”.

También ha prometido que impulsará la negociación política del presupuesto de 2023 para que, tanto en ingresos como en gastos, permita reducir las desigualdades, fortalecer los servicios, combatir el cambio climático, favorecer la reindustrialización y promover nuevos yacimientos de empleo, todo ello a partir de su experiencia como diputada en la comisión de Presupuestos.

Ha destacado los “éxitos” de las futuras gigafactoría de Volkswagen en Sagunt o plataforma de coches eléctricos en Ford Almussafes y ha llamado a pelear por la reforma de la financiación autonómica “por dignidad” y por el trasvase Tajo-Segura, pero sobre todo por las personas que no escucharán su discurso y están preocupadas por el precio de la vida.

Y ha dirigido su mirada más allá de la Comunitat afirmando que “Kiev y Bruselas son ciudades valencianas, la valla de Melilla también está en nuestra piel y en nuestro corazón y el ataque a las mujeres en Washington también concierne a nuestras desigualdades”. “Espero de corazón estar a la altura y aprender mucho, mi puerta estará abierta”, ha rematado.

Al traspaso de carteras han asistido todos los consellers excepto la de Agricultura, Mireia Mollà, y Universidades, Josefina Bueno. Además de allegados a Mas, el acto ha contado con el senador de Compromís, Carles Mulet; el portavoz adjunto en Les Corts y exconseller, Vicent Marzà; la coportavoz de la coalición Àgueda Micó; la coordinadora autonómica de Podem, Pilar Lima; el alcalde de Crevillent –localidad de la que fue concejala Mas–, José Manuel Penalva, o diputados autonómicos como Carmen Martínez y Josep Nadal.