Alicante actualiza la ordenanza de limpieza y recogida selectiva de residuos con un enfoque centrado en la concienciación ciudadana

El Ayuntamiento actualiza la ordenanza de 2016 con nuevas medidas que buscan optimizar el servicio y adaptarse a las demandas de la ciudadanía

El Ayuntamiento de Alicante ha aprobado un nuevo proyecto de ordenanza de Limpieza de los Espacios Públicos y Gestión de Residuos, que sustituirá a la normativa vigente desde 2016. Este cambio responde al crecimiento que ha experimentado la ciudad en términos de servicios de limpieza y gestión de residuos, y tiene como objetivo optimizar el uso de los espacios públicos, ampliar la recogida selectiva y regular nuevos tipos de residuos, como los procedentes de la construcción, jardinería y aquellos considerados peligrosos.

La nueva ordenanza, presentada por el vicealcalde y concejal de Medio Ambiente, Manuel Villar, incluye importantes novedades. Entre ellas, destaca el refuerzo de la recogida selectiva, la regulación del uso del Centro de Transformación de Residuos y la red de Ecoparques, así como un mayor control de las actividades comerciales, hosteleras y eventos públicos, que deberán cumplir con normativas específicas para la gestión de residuos. Además, se mantendrá el horario de depósito entre las 20:00 y las 24:00 horas, con el uso de una tarjeta electrónica para el residuo orgánico.

Ampliación del régimen sancionador

Uno de los puntos clave de la actualización es la ampliación del régimen sancionador. La nueva ordenanza tipifica un total de 86 infracciones, frente a las 63 de la normativa anterior. Estas infracciones abarcan desde el depósito de residuos fuera de horario o enseres voluminosos sin avisar, hasta faltas graves como la no limpieza de grafitis en fachadas. Las sanciones pueden oscilar entre los 300 y 3.000 euros, dependiendo de la gravedad de la falta.

Manuel Villar explicó que las conductas más preocupantes para los ciudadanos, como la no recogida de excrementos de mascotas o el depósito indebido de residuos, serán fuertemente sancionadas, llegando a triplicarse en algunos casos las multas anteriores. Así, por ejemplo, las infracciones relacionadas con micciones en la vía pública pueden conllevar sanciones de hasta 900 euros.

Mejora en la inspección y concienciación

La normativa también pone énfasis en mejorar la labor inspectora, dando más capacidad a los inspectores para controlar tanto el cumplimiento de las concesiones de servicio como la correcta separación de residuos por parte de los particulares. Sin embargo, Villar subrayó que el Ayuntamiento priorizará la concienciación e información a través de programas educativos para la ciudadanía, con el objetivo de fomentar el cumplimiento de las normativas sin necesidad de recurrir a sanciones.

El proyecto de ordenanza ahora pasará a trámite plenario para su aprobación definitiva, previa revisión por la comisión informativa y la posibilidad de enmiendas. Con esta actualización, Alicante busca posicionarse como una ciudad más limpia y comprometida con el medio ambiente, respondiendo a las demandas de sus habitantes y ajustándose a las normativas nacionales y autonómicas en materia de gestión de residuos.