El Ayuntamiento de Alicante invierte casi un millón de euros en mejorar la accesibilidad peatonal en la ciudad

Un ambicioso plan de adaptación de aceras en 60 calles busca eliminar barreras y favorecer la movilidad de los ciudadanos.

El Ayuntamiento de Alicante ha anunciado una inversión significativa de cerca de un millón de euros para llevar a cabo un proyecto de adaptación de las aceras en más de 60 calles de la ciudad. Estas mejoras se centrarán en áreas estratégicas como el entorno del Puente Rojo de la Gran Vía, San Blas, La Torreta, Mercado Central, Carolinas, Garbinet, Cabo de la Huerta, Miriam Blasco, Vistahermosa y Santa Faz, con el objetivo de mejorar la accesibilidad peatonal.

Las obras se llevarán a cabo en tres lotes, y la primera fase será gestionada por la empresa Construmarq Levante S.L., con una inversión de 90.727 euros. Esta fase se centrará en la adaptación de aceras y vados peatonales en calles como Padre Recaredo de los Ríos, Torero José María Manzanares, Capitán Gutiérrez Mellado y avenida del Conde de Casas Rojas, cerca del Puente Rojo de la Gran Vía, además de las calles Cardenal Francisco Álvarez y Wenzhou en el barrio La Torreta.

Los lotes 2 y 3 de las obras han sido adjudicados a la empresa Alcudia, Servicios y Obras S.L., con inversiones de 395.675 y 394.990 euros, respectivamente. Estas fases se centrarán en la adaptación de aceras en 26 y 34 calles en los sectores Oeste y Este de la ciudad.

El proyecto abordará la adaptación de aceras y vados peatonales en áreas clave de la ciudad, incluyendo calles cerca del Mercado Central, Vistahermosa, Cabo de la Huerta, Santa Faz, Carolinas, Garbinet y más. La iniciativa es parte del Plan de Accesibilidad de Alicante y busca eliminar las barreras urbanísticas y facilitar la movilidad de los ciudadanos en espacios públicos.

La concejalía de Infraestructuras y Mantenimiento, dirigida por Cristina García, lidera esta iniciativa que fue licitada en junio con un presupuesto de 916.556 euros y un plazo de ejecución de cuatro meses. El proyecto se enfoca en crear una ciudad más segura para los peatones en su movilidad diaria, garantizando itinerarios accesibles para todos los ciudadanos. Además de las adaptaciones de aceras, las obras permitirán la reparación de pavimentos, bolardos y cerramientos, mejorando la accesibilidad urbana, especialmente en áreas con alto tránsito peatonal y entornos de colegios públicos y centros de salud.

El plan está en línea con el Plan de Accesibilidad de la Ciudad de Alicante, que busca adaptar más de 56 kilómetros de itinerarios peatonales en calles y plazas para garantizar igualdad de oportunidades en la movilidad de todos los ciudadanos.