Flujo de pateras en nuestras costas

Cruz Roja reporta un total de 145 personas atendidas en tres días, incluyendo seis menores de edad, en once pateras diferentes.

Dos pateras que transportaban a un total de 26 personas han sido interceptadas este sábado en las costas de Teulada-Moraira y Calp, en la provincia de Alicante. La información fue confirmada por fuentes de Cruz Roja, que proporcionaron asistencia a los inmigrantes tras su llegada a puerto.

Las operaciones de rescate y asistencia estuvieron a cargo de los Equipos de Respuesta Inmediata en Emergencias (ERIE AHIC) de Cruz Roja, siendo trasladados al de Puerto de Alicante, extendiéndose hasta las 13.30 horas.

La primera patera, con un total de 14 hombres a bordo, fue localizada en Calp alrededor de las 4:00 horas por efectivos de la Guardia Civil. Afortunadamente, todos los ocupantes se encontraban en buen estado de salud y fueron trasladados al puerto de Alicante, donde recibieron la asistencia necesaria por parte de Cruz Roja.

La segunda embarcación fue localizada en la playa de la Fossa en Calp alrededor de las 6:30 horas por la Policía Local. En esta patera viajaban 11 hombres adultos y una mujer adulta, todos ellos en buen estado de salud. Como en el caso anterior, fueron trasladados al puerto de Alicante, donde recibieron atención médica y apoyo.

Con estas dos interceptaciones, Cruz Roja reporta un total de 145 personas atendidas en tres días, incluyendo seis menores de edad, en once pateras diferentes que han llegado a las costas de la provincia de Alicante. A lo largo del mes de octubre, la organización humanitaria ha brindado asistencia a un total de 182 personas que han llegado en patera a la región.

Durante el día anterior, cinco pateras con un total de 71 personas a bordo fueron interceptadas en las costas alicantinas. Estas embarcaciones fueron localizadas en diferentes lugares, como Santa Pola, Guardamar del Segura, Moraira y Altea.

El jueves, otras cuatro pateras llegaron a las costas alicantinas con un total de 48 personas a bordo, desembarcando en lugares como Santa Pola, Benidorm y Altea. Estos sucesos resaltan la persistencia del desafío de la inmigración irregular en las costas de la provincia de Alicante.