Ford Almussafes abre un proceso de negociación con los sindicatos para abordar el futuro de la planta

La dirección de Ford Almussafes ha abierto este lunes un proceso de negociación con todos los representantes sindicales para debatir sobre el futuro cercano de la planta valenciana, según ha señalado el secretario del comité de empresa y portavoz de UGT en la planta, José Luis Parra.

Al respecto, ha señalado que desde hace meses se reclamaba abrir este proceso de diálogo con la compañía con el objetivo de “alcanzar un acuerdo que proteja los derechos de los trabajadores” en la renovación del convenio colectivo y, sobre todo, que “cuando llegue el momento de que la multinacional concrete su apuesta de vender solo coches cien por cien eléctricos en Europa, València tenga la mejor carta” para fabricarlos.

En ese sentido, ha señalado que desde antes de la pandemia se reclamaba esta mesa de negociación y el “detonante” fue el ERE aprobado el pasado viernes en una reunión en la que la dirección emplazó a los sindicatos a una cita para explicar la situación y el futuro de Almussafes.

Así, este lunes la dirección les ha trasladado unos datos “confidenciales” de la situación y han acordado mantener este diálogo con una cadencia que, ha confiado, espera que sea semanal. Así, la próxima reunión será para después del puente aunque aún no hay fecha concreta.

Al respecto, ha señalado que han salido con “una sensación contradictoria” por un lado positiva por la apertura de este proceso pero prevé que sean unas negociaciones “complicadas” por el contexto 
ya que a la pendemia y a falta de semiconductores de automoción se suma un cambio de movilidad generalizado que genera “un cocktail difícil de manejar”.

Al respecto, ha recalcado que para UGT, sindicato mayoritario, “sólo hay un camino, y es conseguir un acuerdo a través de la negociación que sea equilibrado para las partes y que blinde nuestros derechos” en un momento en el que Ford “va a llevar a cabo el rediseño de su negocio en Europa como anunció en noviembre de 2018”.

Desde entonces ha recordado que se han cerrado las plantas en Rusia, Reino Unido y Francia y que en dos años de los 50.000 trabajadores Europa se han reducido en 10.000 los puestos de trabajo.