La Guardia Civil desmantela un grupo criminal dedicado a enviar marihuana a Irlanda mediante paquetería postal

El principal responsable, temiendo su detención, se dio a la fuga en una estación de servicio en Rivas Vaciamadrid, abandonando en el lugar 54 kilos de marihuana.

La Guardia Civil, en el marco de la operación Topila, ha desmantelado un grupo criminal que, mediante paquetes postales, enviaba marihuana desde San Miguel de Salinas y Orihuela Costa a Irlanda. Además, los delincuentes vendían esta sustancia entre consumidores de estas localidades y limítrofes. Todos los miembros de la banda han sido detenidos y entregados a la autoridad judicial, decretando el ingreso en prisión sin fianza del cabecilla.

En el mes de febrero, en el Aeropuerto Adolfo Suárez Madrid-Barajas, la Guardia Civil, a través de la Unidad de Análisis e Investigación Fiscal y Fronteras de Carga Aérea, intervino más de 2 kilogramos de marihuana en dos paquetes postales enviados desde Orihuela Costa y San Miguel de Salinas con destino a Irlanda. Esta acción marcó el inicio de la operación Topila, liderada por los equipos de Policía Judicial de Pilar de la Horadada y Torrevieja, con el objetivo de identificar a los responsables de los envíos.

A medida que avanzaban las investigaciones, se interceptó otro envío en el aeropuerto y se logró identificar al principal responsable, un ciudadano británico, y a una mujer rumana que le ayudaba desde Orihuela Costa. Ambos tenían antecedentes policiales por otros delitos.

Posteriormente, en marzo, se registró un incidente en la localidad de Rivas Vaciamadrid (Madrid). El sospechoso, creyendo que sería detenido, emprendió una huida audaz al enfrentarse a una patrulla de la Guardia Civil en una estación de servicio. Durante su escape, saltó varias vallas de acceso a las vías del Tren de Alta Velocidad (TAV) y abandonó un vehículo. En el interior del automóvil, se encontraron cuatro maletas que albergaban 54 kilogramos de marihuana.

Como resultado de las investigaciones posteriores, se descubrió que el fugado se escondía en un domicilio de San Miguel de Salinas, acompañado por otros dos compatriotas. Estos colaboraban en funciones logísticas y en la venta de drogas a consumidores locales. La vivienda estaba fuertemente protegida, con cámaras de seguridad y tres perros de los tipificados como potencialmente peligrosos.

La operación culminó entre los días 18 y 22 de mayo, con la realización de dos registros domiciliarios en San Miguel de Salinas y Orihuela Costa, y la detención de todos los miembros de la banda, tres hombres y una mujer, de edades comprendidas entre los 23 y 33 años. A todos ellos, según su grado de participación, se les han imputado los delitos contra la salud pública por tráfico de drogas, desobediencia a los agentes de la autoridad y pertenencia a grupo criminal.

A lo largo de estas investigaciones se han incautado más de 60 kilogramos de cogollos de marihuana, un arma corta, 490 euros en billetes de diverso valor, instrumentos para el pesaje, embalaje y producción de aceite de hachís, además de documentación y terminales de telefonía móvil. 

Los detenidos, junto con las diligencias y efectos intervenidos, han sido puestos a disposición del Juzgado de Instrucción nº 2 de Torrevieja, el cual ha decretado el ingreso en prisión sin fianza del cabecilla de la banda, mientras que para el resto ha ordenado la libertad con medidas cautelares.

Durante la operación, los investigadores contaron con el apoyo de la Unidad de Seguridad Ciudadana (USECIC) de Alicante, unidades de Seguridad Ciudadana de la Compañía de Torrevieja, Servicio Cinológico, además del Área de Investigación del Puesto Principal de Rivas Vaciamadrid (Madrid).